Buey de mar.

¿Quién se atreve a ofrecer un buey de mar a sus invitados sin riesgo de mancharse y combinado con un“dipeo” de nivel como entrante informal?

¡Sorprende a tus invitados!

Supongamos que tenemos invitados a cenar y queremos darle a la reunión un aire informal a la vez que sofisticado. Compartir comida mientras conversamos ayuda a romper el hielo y encaminar la velada. Esto solo se cumple si los comensales tienen química entre ellos y si la comida no se interpone dificultando su disfrute a la hora de saborearla por su tamaño o incomodidad para llevarla a la boca. Vamos a centrarnos en la comida…Tampoco debemos olvidar el riesgo de mancharnos, o manchar al vecino.  Con todos éstos condicionantes seguro que un entrante a base de marisco estaría descartado de antemano de cualquier menú. Pues bien, para triunfar hay que arriesgar o, mejor dicho, que parezca que arriesgamos para satisfacer a nuestros invitados aunque todos los riesgos los tengamos contemplados y minimizados. Es por esto que nuestra propuesta de hoy es un buey de mar.

Preparación.

Envase de buey de mar ultracongelado.

Lo podemos encontrar cocido y ultracongelado. En ésta ocasión hemos comprado éste producto de la marca ERRIGAL BAY en supermercados MERCADONA. Es muy importante tener paciencia a la hora de descongelarlo ya que si forzamos la descongelación perderemos buena textura si nos pasamos con el microondas o lo romperemos si intentamos despiezarlo sin estar descongelado.

Buey de mar descongelado y listo para preparar.

Una vez abierto el envase procedemos a ir desmembrando la pieza separando las patas del cuerpo. Apoyando el buey sobre una tabla de cortar y cubriendo con un paño de algodón para que no salpique, procedemos a ir fracturando pata a pata nuestro buey. El objetivo es romper el exo esqueleto para que resulte muy fácil extraer la carne sin mancharnos.

Cuidado con las salpicaduras cuando lo partamos.

Seguidamente extraeremos el interior teniendo cuidado de conservar el caparazón que luego nos servirá como recipiente. Lo haremos levantando la parte inferior del caparazón.

El vaciado lo haremos mucho mejor a mano.

Debemos recordar que se trata de un animal que ya está cocido y que toda la carne, huevas, etc., están listas para ser consumidas. Únicamente le vamos añadir algunos ingredientes que lo harán más sabroso.

Picamos la carne del buey de mar.

En un plato aparte iremos depositando toda la carne y líquidos. Además, las partes más grandes las picaremos con un cuchillo lo más finamente que podamos sin llegar a triturarlas.

Añadimos mayonesa.

Una vez picada y mezclada toda la carne del interior de nuestro buey de mar le añadiremos mayonesa al gusto y lo mezclaremos hasta obtener una textura homogénea.

El toque final se lo dañemos regando con un chorlito de brandy, también al gusto. En éste punto son necesarias dos puntualizaciones: en primer lugar el brandy es un licor con un sabor muy fuerte y característico que puede estropear nuestro plato si nos excedemos, si nos gusta mucho es mejor tomarlo en una copa. En segundo lugar tiene una alta graduación alcohólica, lo que no es recomendable en caso de que lo vayan a comer los niños.

Pues bien, ya tenemos nuestro buey de mar listo para empatar. Como hemos mencionado anteriormente lo vamos a presentar en su caparazón original.

SOSmenú no ha recibido ninguna compensación económica de las marcas o productos mencionados en este artículo.

Esperamos que os guste y que disfrutéis elaborándolo. Si os ha gustado o si tenéis alguna variante compartidlo con nosotros y añadid vuestros comentarios.